“Despliegue de sensaciones
a cualquier hora del día”
Ambiente cosmopolita, decoración con un aire tropical y un recetario que mira a muchas partes del mundo describen la experiencia en Bocachica, un restaurante que invita a disfrutar de la gastronomía a cualquier hora del día. Por supuesto, para probar el café, que se puede acompañar de interesantes argumentos lamineros como la tarta de chocolate o pastel de frutas.
Una buena ubicación y una atención en sala profesional son otras señas de identidad, también a mediodía de la mano de un menú en el que se combinan buenas materias primas, recetario puesto al día y cuidadas presentaciones.
Tapas y raciones para abrir boca y curiosas ensaladas como la de melocotón braseado son una buena forma de acercarse a la carta. También hay un interesante apartado de cocinas del mundo, y la parrilla y la brasa son fundamentales. Picaña de ternera, chuletón, costillar de cerdo o pulpo son algunos de los productos que se trabajan en ella. Sin olvidar, por supuesto, el colofón laminero de recetas como la cheescake casera.
“Despliegue de sensaciones a cualquier hora del día”
Ambiente cosmopolita, decoración con un aire tropical y un recetario que mira a muchas partes del mundo describen la experiencia en Bocachica, un restaurante que invita a disfrutar de la gastronomía a cualquier hora del día. Por supuesto, para probar el café, que se puede acompañar de interesantes argumentos lamineros como la tarta de chocolate o pastel de frutas.
Una buena ubicación y una atención en sala profesional son otras señas de identidad, también a mediodía de la mano de un menú en el que se combinan buenas materias primas, recetario puesto al día y cuidadas presentaciones.
Tapas y raciones para abrir boca y curiosas ensaladas como la de melocotón braseado son una buena forma de acercarse a la carta. También hay un interesante apartado de cocinas del mundo, y la parrilla y la brasa son fundamentales. Picaña de ternera, chuletón, costillar de cerdo o pulpo son algunos de los productos que se trabajan en ella. Sin olvidar, por supuesto, el colofón laminero de recetas como la cheescake casera.